· 

Vida estamos en paz, la bio de China Zorrilla

 

 

 

 

China Zorrilla no me era indiferente, en mis habituales zapping de TV era encontrarla en una nota y hacer stop, la consecuencia frescura y el encanto de una historia que me atrapaba.

Por eso, el día que ella se fue definitivamente de gira, iba escuchando la radio cuando comentaron la próxima y justa aparición de el libro "Vida, estamos en paz", de Diego Fisher.

El libro no cuenta estas historias que solia hacer China, sino es la historia de una mujer extraordinaria idealista y sincera con ella misma y con los demás, como toda persona idelista lo fue en el amor de pareja y en el sentimiento hacia su patria de valores. Fue aristocrática y culta pero supo vivir y representar el sentido de lo popular, perseguida por el Plan Cóndor, prohibida aqui y allá, pero íntegra.

Leer su biografía fue un placer, como lo fue disfrutar de su arte.

Como el libro, termino mi texto con el poema de Amado Nervo:


 

 

 

Muy cerca de mi ocaso, yo te bendigo, Vida,

porque nunca me diste ni esperanza fallida,

ni trabajos injustos, ni pena inmerecida;

porque veo al final de mi rudo camino

que yo fui el arquitecto de mi propio destino;

que si extraje la miel o la hiel de las cosas,

fue porque en ellas puse hiel o mieles sabrosas:

cuando planté rosales coseché siempre rosas.


Cierto, a mis lozanías va a seguir el invierno:

¡mas tú no me dijiste que mayo fuese eterno!


Hallé sin duda largas las noches de mis penas;

mas no me prometiste tan sólo noches buenas;

y en cambio tuve algunas santamente serenas...


Amé, fui amado, el sol acarició mi faz.

 

¡Vida, nada me debes! ¡Vida, estamos en paz!